Cada noche sueño con despertar y ver que tengo otra oportunidad, para ser esto que siento, beberme el momento, me gustaría que alguien al leer esto supiera que es cierto que tememos abrir la boca y la vida es un manantial eterno, morimos adaptándonos, vendemos nuestra libertad cediendo nuestra alma a la auto pista por donde todos los dormidos irán, entonces no encontramos la ilusión ni esa maravillosa espontaneidad, vivimos sin un por qué, porque la lucha la abandonamos atrás.
Esta caja que es mi corazón se está llenando de la valentía de ser sin más, sin adornos y siente compasión del temer. Viví encerrado en mi mismo pero lo que debía protegermeme estaba empezando a romper, este romanticismo es mayor y ahora veo más pequeño mi amor y ahora podría, o eso creo,dar algo más sincero, sin esperar entonces, ese niño me miró y pensé ¿qué es tan malo para no luchar? si la esperanza estaba en sus ojos, ¿cómo lo podría obviar? y yo decía que estaba solo, mientras la tierra me ofrecía sus flores y los pájaros seguían cantando con una alegría que cada día me resulta algo más natural.
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